Auditoria legal: una pieza cada vez más importante en la gestión de una empresa

¿Qué son y para qué sirven las auditorias legales?

El propósito de las auditorias legales (también conocidas como due diligence en inglés) es obtener la mayor información posible de una empresa para emitir una opinión fundada sobre su situación legal donde se precisen las fortalezas y debilidades de la misma conforme una legislación en particular y se propongan medidas correctoras.

Si bien la mayoría de las auditorias legales tienen lugar ante los supuestos de ventas o uniones de empresas nada obsta a que se efectúen voluntariamente con el nada desdeñable propósito de saber el grado de cumplimiento de las obligaciones legales por parte de una empresa (sea una sociedad o un empresario autónomo).

Una auditoria legal es una vía idónea para mantener informados de manera precisa a socios, accionistas, representantes (legales o voluntarios) y a terceros (adquirentes, socios estratégicos, acreedores financieros,…)

En su ejecución se procede a la revisión de toda la documentación legal y administrativa desde la fecha en que la sociedad se constituyó hasta el momento en que fue solicitada.

La auditoria legal puede ser general de toda la empresa o ser específica de una cierta área en concreto. Contar con información veraz de una empresa evitará seguramente la toma de decisiones contrarias a los intereses de los afectados por ella. En este orden de ideas para una auditoria legal sirve para optimizar los sistemas de gestión de su empresa.

Sucede con mucha frecuencia que con el desarrollo de la actividad de una empresa y los continuos cambios legislativos ciertos aspectos legales queden olvidados y no sean advertidos hasta que son fuente de conflicto o el conflicto mismo.

Existe una multiplicidad de ejemplos que se pueden citar en el ámbito de las pequeñas y medianas empresas (PYMES) tales como: desgravaciones fiscales sin cumplir los requisitos para ello, errores en el sistema retributivo de los trabajadores, omisión de llevanza de libros obligatorios, de su legalización o presentación en tiempo y forma, confusión de patrimonios entre socios o gestores y la sociedad, incompatibilidades, cláusulas abusivas o inoperativas en los contratos suscritos con clientes o proveedores, poderes o cargos no revocados o que se ejercen de facto, tratamientos o cesiones ilegales de datos de carácter personal,…

Estos «olvidos» errores se suelen acentuar -y también detectar- cuando se producen cambios en servicios externalizados tales como contabilidad, fiscalidad, prevención de riesgos laborales, etc.

¿Cómo se desarrolla una auditoría legal?

Como proceso de evaluación que es, la auditoria legal se desarrolla en diversas etapas de las que todas o la mayoría tienen lugar en la sede de la empresa debido a la proximidad y facilidad de acceso a las fuentes de información (documentos, personas, etc.)

Se inicia con la recopilación de los documentos que reflejen los actos de la sociedad desde su constitución. Esta recopilación se hace en orden cronológico y por materias. Luego se procede al contraste de estos documentos con las personas de la empresa o externas responsables de su gestión. Se trata de tener un conocimiento profundo de la actividad y funcionamiento de la empresa.

La información resultante se contrasta con la legislación vigente y se obtiene un detalle del grado de cumplimiento a la misma.

El informe de auditoría resultante dictaminará sobre la adecuación a la legalidad vigente, identificará sus deficiencias y propondrá las medidas correctoras o complementarias necesarias. Igualmente, incluirá los datos, hechos y observaciones en que se basen los dictámenes alcanzados y las recomendaciones propuestas.

¿Quiere comprar o vender un negocio y no sabe si puede tener problemas legales en el futuro? ¿Ha cambiado de colaboradores y quiere verificar que la gestión se llevaba conforme la normativa de aplicación? ¿Quiere reorganizar su empresa y quiere tener información legal detallada antes de hacerlo?

La Auditoría legal tiene por objeto analizar y apreciar, con vistas a las eventuales las acciones correctivas, la “corrección legal” del funcionamiento de una empresa. En tanto herramienta de análisis puede y deber ser utilizada en todo momento por esta para la toma de decisiones informadas.